CINCINNATI (ESTADOS UNIDOS) - El fabricante estadounidense de productos de consumo Procter & Gamble (P&G) obtuvo en su tercer trimestre fiscal un beneficio neto atribuible de 2.153 millones de dólares (1.999 millones de euros), un 17,5% menos que los 2.609 millones de dólares (2.423 millones de euros) que ganó en el mismo periodo del ejercicio anterior, informó la empresa en un comunicado.

La facturación de la compañía propietaria de marcas como Braun, Pantene o Duracell alcanzó en su tercer trimestre fiscal, que concluyó el pasado 31 de marzo, los 18.142 millones de dólares (16.847 millones de euros), un 7,6% menos que los 19.641 millones de dólares (18.240 millones de euros) de hace un año.

P&G explica que este descenso de las ventas incluye un impacto negativo de los cambios de divisas de ocho puntos porcentuales, así como el efecto de las desinversiones en marcas de poca importancia, lo que restó un punto porcentual las ventas. En consecuencia, las ventas orgánicas subieron un 1%.

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En los nueve primeros meses de su año fiscal, P&G obtuvo un beneficio neto atribuido de 6.515 millones de dólares (6.050 millones de euros), un 28,1% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior, mientras que sus ventas bajaron un 4% respecto a hace un año, al alcanzar los 58.489 millones de dólares (54.312 millones de euros).

El presidente y consejero delegado de la compañía, A.G. Lafley, destacó que estos resultados están en general en línea con lo que esperaban, e insistió en que con el tiempo compensarán el impacto de los cambios de divisas con mejoras en los precios y en el mix y con la reducción de costes.

; "Estamos centrados en las oportunidades significativas que podemos controlar, como las iniciativas de marca, la innovación de precios, la simplificación de la cartera de marcas y negocios, los ahorros generales o las iniciativas de productividad para las cadena de suministro, con el fin de mejorar nuestros resultados en 2015 y años posteriores", agregó.