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Rocío ALONSO LOPEZ
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16 ene. 2023
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Marco Vincenzo reinventa al hombre de Etro y Charles Jeffrey homenajea a Escocia en Milán

Traducido por
Rocío ALONSO LOPEZ
Publicado el
16 ene. 2023

Dos grandes estrenos marcaron la tercera jornada de la Semana de la Moda de Milán. El primero fue la presentación de la primera colección masculina de Marco de Vincenzo para Etro a última hora de la mañana del domingo, seguida del aclamado debut del diseñador británico Charles Jeffrey Loverboy en las pasarelas milanesas a última hora del día.
 

Etro, otoño/invierno 2023/24 - © ImaxTree


Tras una exitosa primera colección femenina el pasado septiembre, el nuevo director artístico de Etro, Marco de Vincenzo, se ha lanzado esta vez al menswear, tomando como punto de partida la herencia textil de la casa de lujo italiana. Con delicadeza, remodela al hombre Etro rejuveneciéndolo con un toque de delicadeza romántica. Un examen totalmente aprobado.
 
"Quería rendir homenaje a la familia, empezando por los tejidos, que son inseparables de la historia de la empresa. Poca gente lo sabe, pero empezó con los tartanes. Durante seis meses, me sumergí en los archivos, fusionando esta riqueza con mi propia visión", explicó el diseñador, quien tuvo la buena idea de presentar su colección en un enorme hangar lleno de rollos de tela y cientos de muestras de tejidos, directamente de los almacenes de la casa.
 
El primer look muestra un acogedor estampado geométrico a cuadros convertido en abrigo. Más adelante, una tela de tapicería verde militar con rayas doradas se utiliza para confeccionar un enterizo, mientras que con tapiz, el diseñador recorta un abrigo y una chaqueta bolero, y luego confecciona una serie de trajes en hermosas telas de tartán, consistentes en elegantes chaquetas de doble botonadura y largos pantalones acampanados, así como maxifaldas escocesas para poner por encima de unos jeans. También juega con el contraste entre los cuadros grandes de un abrigo y los cuadros más pequeños de unos pantalones a juego en los mismos tonos. Destacan también los zuecos de fieltro y tela con suela de madera tachonada, que harán las delicias de los amantes de la moda.
 
El toque más personal del diseñador se percibe en los magníficos tejidos de punto bordados con frutas en relieve o con un efecto óptico con una serie de ondas en colores degradados. "El nuevo hombre de Etro combina una acogedora actitud privada y doméstica con un estilo público más excéntrico. Para salir por la noche, saca el cinturón bordado, por ejemplo. Tiene algo de romántico, flores y luz", dijo Marco De Vincenzo.
 
En primera fila, toda la familia aplaudió, visiblemente encantada, con el patriarca fundador Gerolamo Etro (Gimmo) y sus hijos, Veronica, Ippolito, Jacopo y Kean. En 2021, vendieron el 60 % del capital de su casa a L Catterton, el fondo de capital riesgo cofundado por el gigante del lujo LVMH.

"Marco tiene mucho respeto. Su menswear es interesante y está profundamente ligado a nuestra historia", afirmó Kean, que hasta hace poco se encargaba de las colecciones masculinas. Y recordó que cuando se fundó Etro en 1968, "no era un fabricante, sino un editor textil, que se abastecía de hilos de India y China, y luego mandaba fabricar sus propios tejidos y diseños en Italia para abastecer a las casas de la época".

 

Charles Jeffrey Loverboy, otoño/invierno 2023/24 - © ImaxTree

Charles Jeffrey Loverboy "rinde homenaje a los trabajadores, al Renacimiento y a Escocia"



Cambio de escena con Charles Jeffrey Loverboy, quien nos sumerge en una oscura sala de máquinas. De una espesa niebla surgen extraños personajes con los rostros ennegrecidos por el hollín, gorros en la cabeza, brazos protegidos por grandes guantes de ferretero y un farol en la mano, como los que utilizaban antaño los mineros del carbón. Vestidos con grandes trajes grises que revisan los códigos tradicionales masculinos. Looks oscuros, que pronto dan paso a un castillo de fuegos artificiales de colores, dibujos y estampados exuberantes.
 
"Para mi llegada a Milán, una ciudad industrial y trabajadora, que se parece bastante a Glasgow, mi ciudad natal, he querido rendir homenaje a los trabajadores, al Renacimiento y a Escocia", declaró el diseñador al finalizar el desfile, con lágrimas en los ojos, francamente emocionado por sus primeros pasos en la capital lombarda, donde recibió una gran ovación.

"La idea era mostrar el desarrollo de una historia como en una película. Es un poco una alegoría de lo que está pasando en el mundo en este momento", subrayó.


La colección presenta una serie de coloridos personajes, cada uno con su propia personalidad. La Escocia natal de Charles Jeffrey está omnipresente en los estampados de tartán, que pueden encontrarse en medias, calcetines, zapatos, chaquetas, blusones y faldas escocesas. Pero también a través de los chalecos Shetland, las prendas de punto y los suéteres de jacquard decorados con el famoso estampado escocés Fair Isle. El tartán también aparece en algunas piezas de vinilo con grandes cuadros o modelos con cuadros estilizados.
 
Otra influencia, que aporta un toque más de locura, es la del ilustrador y guionista de cómics angloamericano John Byrne, cuyos dibujos locos y psicodélicos se reproducen en estampados sobre magníficos abrigos y trajes, realzados con accesorios dorados (zapatos, bolsos, tops).
 
Los colores van in crescendo gradualmente, desde el amarillo ocre intenso al azul real y el rojo amapola, mientras surge un elemento de protesta en trajes de cuero o prendas recortadas de papel de periódico con titulares que advierten de la emergencia climática. Durante algunas temporadas más, Charles Jeffrey pretende hacerse oír en Milán.  
 

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