Iris Van Herpen convierte la moda en arte

Hay un cierto momento en el que la moda se convierte, aunque sea por unos pocos minutos, en arte. Este ha sido el territorio al que han entrado los invitados a la pasarela de Iris Van Herpen este lunes en París.

La alta costura está destinada a ser el laboratorio de la moda y y este ha sido tan experimental como se pueda imaginar. En una oscuridad casi total en las profundidades del Cirque d’Hiver, cuando las luces aparecieron lentamente para revelar cinco grandes tanques de agua, con músicos en vivo. El grupo danés Between Music, que logró cantar y tocar percusiones y címbalos usando micrófonos miniatura debajo del agua.

La colección fue titulada Aeriform, ya que gran parte de ella estaba hecha de plumas de metal ligero, patrones de encaje cortados a láser y moldeados a mano en formas geodésicas. Un vestido en particular fabricado de tull invisible en colaboración con Philip Beesley, el arquitecto canadiense conocido por sus instalaciones inmersivas. Otro vestido biomimético en encaje plateadocosido a mano para crear ondas mientras las modelos caminaban. Después, uno en acero cortado a láser, formado en una tela de araña de metal.

"Se trata de la materialidad aérea y ligera", dijo esta amable diseñadora holandesa, que celebrará su décimo aniversario con una fabulosa fiesta de noche, donde la DJ será la leyenda islandesa Björk. El cabello, acabado en decenas de trenzas, parecía haber surgido de algún océano lejano. Es muy probable que poco de esta colección se convierta en ropa real para los clientes que pagan. Pero la influencia de Van Herpen se sentirá en todas partes, en su visión tecnológica romántica y en las colecciones que prepara para Swarovski. Sobre todo, por la determinación de romper nuevas fronteras en la moda, tanto en los materiales como en el escenario, Van Herpen se ha convertido en una de los líderes de la alta costura de París, y su capacidad, muy a menudo, para convertir la moda en arte.

Iris Van Herpen convierte la moda en arte

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