ABG completa la adquisición de Barneys New York
A casi tres meses de que Barneys se declarara en quiebra, Authentic Brands Group anunció este viernes que ha finalizado la compra de la tienda por departamentos y ha presentado sus planes futuros para la empresa.
El acuerdo estaba valorado en un estimado de 271 millones de dólares en efectivo cuando se anunció por primera vez en octubre, y recibió la aprobación del tribunal este jueves.
Entre tanto, Barneys había recibido una oferta competidora por parte del ejecutivo de salones comerciales israelí Samuel Ben-Avraham, pero finalmente no calificó para una subasta de quiebra.
Mirando hacia el futuro, ABG, cuya cartera de marcas incluye Juicy Couture y Nautica, tiene la intención de aprovechar su alcance internacional para reiniciar Barneys y aumentar su presencia global a través de pop-up stores, shop-in-shops y del comercio electrónico, así como una nueva tienda independiente en un mercado clave de los EE.UU. que aún no ha sido identificado.
Como parte de estos planes, ABG está otorgando la licencia del nombre de Barneys a Saks Fifth Avenue, quien servirá como socio exclusivo de la marca en el comercio minorista y electrónico en Estados Unidos y Canadá. De hecho, es en el quinto piso del recién renovado buque insignia de Saks Fifth Avenue en Nueva York donde comenzará el reinicio de Barneys, con una nueva tienda en tienda.
"Hay una visión para crear experiencias multisensoriales que llevarán a Barneys Nueva York a una nueva era mientras se mantiene fiel al ADN de la marca", explicó ABG en un comunicado de prensa.
"Su enfoque inicial estará en colaboraciones de alta moda, productos de marca, y la expansión de la venta al por menor internacional tanto en espacios físicos como en el e-commerce", se indicó en el documento.
Los informes anteriores sobre la adquisición revelaron que ABG cerrará las restantes ubicaciones comerciales de Barneys, pero el anuncio de la compañía el viernes también reveló los planes para transformar el buque insignia del minorista de Madison Avenue en una experiencia comercial emergente con instalaciones y exposiciones culturales.
Barneys originalmente se declaró en bancarrota bajo el Capítulo 11 en agosto, cuando un aumento significativo en el alquiler de su tienda insignia resultó ser la gota que colmó el vaso para el operador de los grandes almacenes de lujo. Junto con el aumento de los alquileres, la compañía ya había estado luchando con una serie de otros problemas que han plagado a los minoristas tradicionales en los últimos años, en particular el aumento de la competencia de gigantes en línea como Amazon.
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