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28 oct. 2013
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Philea: "En China hace falta una actitud humilde pero una oferta brillante”

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28 oct. 2013

Si bien Francia sigue siendo un argumento de venta en China, la calidad de las producciones chinas no debería ser tomada a la ligera. Tal es la advertencia de Axelle Dubourg-Doumeingts, que estuvo presente en el Première Vision China en tanto que directora de ventas para China de la francesa Philea. El año pasado, la empresa realizó el 70% de sus 16 millones de euros de ventas en el extranjero, 15% de los cuales fueron realizados en China. Porcentaje que está en crecimiento gracias a una clientela para la que la apariencia tiene una gran importancia.

Axelle Dubourg-Dougmeingts



FashionMag - ¿Cómo se trabaja con socios chinos?

Axelle Dubourg-Doumeingts - Con los profesionales chinos, aún más que con el resto de Asia, no basta un año y dos viajes para recibir un primer pedido. Todo se hace paso a paso, con un seguimiento periódico. Por lo tanto, yo me desplazo cuatro veces al año con el fin de visitar al máximo a los principales clientes. Y permanezco en contacto directo con nuestros diferentes agentes locales. Es muy necesario “estimularlos”, lo que pasa por restaurantes o visitas a París cuando vienen a vernos. Es normal consentirlos, ya que para ellos es necesario por cuestiones de confianza. Y tampoco imponerse, permanecer humilde. Si se trabaja en el mundo de la moda en París, se tiene la impresión de ser el centro del mundo. Pero la China es un mundo por sí sola, por lo que es necesario no buscar imponerse de esa forma.

FM - ¿Cómo resumiría la oferta buscada por las empresas chinas?


ADD - En Francia, algunos la clasificarían como de mal gusto. Pero aquí hace falta que sea brillante, resplandeciente, ya que eso es lo que gusta. Particularmente para nuestra clientela, compuesta por mujeres de cierta edad (45-70 años). En Francia, una vez llegan a los 60 años, las mujeres adoptan un cierto clasicismo. En China, nuestra clientela se compone de mujeres que tienen dinero y poder, y desean mostrarlo. El mercado evoluciona positivamente. Los chinos tienen sus propias tendencias, esto es algo incontestable. Por lo tanto no hace falta pretender imponerles las nuestras. Por otro lado, la competencia es muy fuerte entre la oferta textil china, japonesa y coreana que, por ejemplo en los colores lisos, deben buscar distinguirse por medio de materiales más brillantes, dotados de una cierta armadura, de una especificidad que resalte. Ya que para los lisos sosos no precisan de los europeos o los franceses. Además que nuestros productos son más caros.

FM - ¿Francia sigue siendo un argumento de venta?

ADD - Francia sigue siendo un argumento que produce ventas. En nuestro caso aún más ya que producimos en Francia con hilos europeos, y esto es algo que ellos reconocen y aprecian aún más. Pero no podemos entrar diciendo que somos los mejores por ser franceses. Ahora, el made in France hace frente al made in China, del que se sienten muy orgullosos. Por contrario a lo que se piensa normalmente, hay muy buenos materiales, que son a veces incluso comparables a los nuestros. Pero lo hecho en Francia concede un cierto glamour, lo que los lleva a reivindicar al made in France por encima de sus propias etiquetas. Pero es necesario permanecer alerta: no están muy lejos. Y si este french touch llega a desaparecer, nos alcanzarán rápidamente.

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