MADRID, 18 (EUROPA PRESS)-La diseñadora gallega María Barros ha cerrado la primera jornada matinal de la Cibeles Fashion Week, en la que ha presentado sus últimas tendencias para primavera-verano 2011, arropada por algunos famosos como la actriz televisiva Elena Ballesteros o la escritora Espido Freire.

María Barros

La colección "Moi", muestra a la diseñadora en su estado más puro, sin pudores ni secretos, en la que se ha mostrado tal y cómo es, realizando un ejercicio de sinceridad consigo mismo. Su inspiración la recibe de la famosa teoría del psicoanálisis, proyectando sobre sus tejidos la idea que la diseñadora tiene de sí misma. De esta forma, la modista se deja llevar por sus sentimientos para crear perfiles siluteados que se vislumbran entre la timidez y la prudencia mostrada a través de delicados telas como tules, organzas y sedas.

Los vestidos largos, las faldas, las blusas y los pantalones destacan por los volúmenes y pliegues, a los que María Barros les da un lugar destacado en la colección. La paleta de colores de la creación de la diseñadora abarcan desde el rosa, fucsia, verde, blanco, sin dejar de lado el malva y el morado.

Las modelos, que llevaban cubierto la cabeza con un pañuelo que sólo les dejaba al descubierto un ojo, llevaban maquillados los labios de rojo y lucían un lunar negro en sus mejillas. Sencillas en su día a día, la mujer de María Barros no lucía grandes complementos, salvo zapatos de tacón alto.

MONTSE BASSONS APUESTA POR UN MUJER SEDUCTORA

La Gran Dame del baño, Montse Bassons, se atreve con una colección de baño arriesgada y futurista para 2011. Siendo la segunda vez que se sube a la Cibeles Madrid Fashion Week, esta diseñadora catalana presenta a una mujer guerrera, seductora y tribal que no se deja avasallar por nadie.

Los trajes de baño, en una gran cantidad de formas (bikinis, trikinis, bañadores en formas de culote) se complementan con túnicas, capas de neopreno, que aportan a la mujer de Montse Bassons un aire futurista. Los diseños, mimados al máximo, destacan por la asimetría de los tirantes y las tiras de los trikinis.

El negro es el color estrella de la colección, conviviendo a la perfección con tonos marrones, cobres, lilas o verdes tornasolados, que aportan a las modelos una elegancia, muy característica de la firma Bassons.

En cuanto a los tejidos, destacan las lycras con efecto metalizado que recuerdan a las mallas de los guerreros, combinadas con tejidos mates que imitan escamas, transparencias o estampados animales.

Las modelos, maquilladas ligeramente, lucían grandes pelucas con cardados, que evocaban al futuro. La mujer de Montse Bassons se viste de complementos, entre los que destacan gafas de sol, colgantes, guantes y sandalias de altísimo tacón.